Las Islas Malvinas son parte del territorio argentino y como tal deben ser reclamadas, no cooperando con el usurpador británico mientras no se siente a negociar con Argentina la situación colonial existente impuesta en el Atlántico Sur. Donde Gran Bretaña no entiende de legitimidad sino de invasión y despojo.
La falsa autodeterminación kelper agitada por la propaganda británica no es otra cosa que una vil maniobra para No resolver la cuestión de fondo de la soberanía por Malvinas, Georgias, Sandwichs del Sur y espacios marítimos circundantes. Argentina debe procurar trazar un plan estratégico de defensa nacional transversal a cualquier color político y llevarlo a cabo como parte de una gran estrategia para recuperar las Islas Malvinas, aumentando la capacidad militar disuasiva que debe tener cualquier país serio. Se debe tener conciencia que Argentina tiene un gran frente marítimo que debe ser defendido.
La falsa autodeterminación kelper agitada por la propaganda británica no es otra cosa que una vil maniobra para No resolver la cuestión de fondo de la soberanía por Malvinas, Georgias, Sandwichs del Sur y espacios marítimos circundantes. Argentina debe procurar trazar un plan estratégico de defensa nacional transversal a cualquier color político y llevarlo a cabo como parte de una gran estrategia para recuperar las Islas Malvinas, aumentando la capacidad militar disuasiva que debe tener cualquier país serio. Se debe tener conciencia que Argentina tiene un gran frente marítimo que debe ser defendido.
El 11 de marzo de 2016 la Comisión de Límites de la Plataforma Continental (CLPC) creada en 1982 y compuesta por 21 expertos encargados de examinar los datos y toda la información presentada por los estados ribereños sobre el límite exterior de la plataforma continental - aprobó la presentación argentina sin realizar recomendaciones, quedando desde ese momento reconocidos por la comunidad internacional los límites del territorio argentino en lo que respecta a su plataforma marítima en las áreas no sujetas a disputas. El 28 de marzo de 2016 el Ministerio de Relaciones Exteriores realizó una presentación sobre los nuevos límites, durante la cual se expresó que al aprobarse la presentación la ONU reconoció que existe una disputa de soberanía mientras el Reino Unido, trata de obviar simulando una soberanía que no tiene sobre Malvinas ni en otras Islas del Atlántico Sur.
Sin una Armada Argentina operativa y con capacidad disuasiva, y sin aprovechar los astilleros argentinos de Rio Santiago ( hoy tomados por otros intereses sindicales que no suma nada a la Defensa del país ) para fabricar buques que aporten más naves a la flota naval militar argentina, según las necesidades requeridas, será difícil que pueda ser viable cualquier proyecto estratégico para la defensa de la soberanía nacional en el Mar Argentino.
La desaparición del submarino ARA San Juan llevó a la Armada Argentina a quedarse prácticamente sin submarinos y de prolongarse en el tiempo esta situación, llevaría también a desaparecer el personal experto en la fuerza de submarinos, encargados en formar a otras generaciones en la materia.
Es erróneo deducir que Argentina no tiene hipótesis de conflicto, con un Mar Argentino invadido por una Potencia extranjera, y con uno de los socios de G.Bretaña en la región, que sigue comprando cada vez más armamento, mientras que autoridades argentinas especulan usar a las Fuerzas Armadas para combatir al narcotráfico y nada más. No se puede disuadir o responder a cualquier agresión externa sin poder militar.
En 2010 aviones de combate británicos volaron desde Malvinas al sur de Chile, sin ser interceptados por ningún avión ni radar argentino, sino por algún ciudadano radioaficionado patriota que reveló dicho incidente a pesar que luego se dijo que habían sido autorizados por Argentina.
Cabe plantearse si China hubiera resuelto su conflicto de soberanía con el Reino Unido por la usurpación de Hong Kong - sin ningún tipo de poder militar ni peso regional en la zona.
Sin una estrategia de defensa, Argentina no puede abrir ningún camino de dialogo serio por la soberanía de las Islas Malvinas con un invasor colonialista británico que se impone militarmente por la fuerza en dicho territorio argentino y además especula expandir sus ambiciones hacia el sector antártico reclamado por Argentina.
Un plan estratégico para la Defensa argentina, transversal a todos los gobiernos puede ser un gran aporte a una estrategia seria para recuperar los territorios invadidos por el colonialismo británico.
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