La madre del soldado santacruceño caído en la guerra de Malvinas en 1982 dijo que se siente en paz, tras haber sido notificada de la identificación de los restos de su hijo.
Sonia Cárcamo de Ortega, junto a su esposo José, recibieron el lunes pasado a la comisión que les informó sobre los resultados de los ADN para los que habían dado una muestra de sangre hace casi dos años.
El encuentro, respetando protocolos internacionales, se realizó en privado y luego los familiares podían difundir o no la información.
Rosalinda Godoy, vicepresidenta de la Fundación No Me Olvides, explicó que la familia decidió que la confirmación de que los restos del héroe riogalleguense habían sido identificados se hiciera en el Centro de Veteranos de Malvinas que lleva su nombre: José Honorio Ortega.
José Honorio Ortega, el único soldado santacruceño caído en
Malvinas.
Malvinas.
“Tengo que volver hoy porque tengo una misión especial”, explicó José Ortega a su madre, Sonia Cárcamo, el 18 de marzo de 1982, el último día que estuvieron juntos en nuestra capital. El soldado riogalleguense había llegado de Sarmiento, tenía un permiso especial para su familia.
Nacido el 21 de julio de 1963, a los 19 años, el 1º de febrero de 1982, se incorporó al Regimiento de Infantería 25 en Colonia Sarmiento, siendo destinado a la Compañía de Infantería “B”. Allí recibió la instrucción básica para ser considerado soldado conscripto en forma altamente satisfactoria. Su número de selección fue el 470 y partió hacia Malvinas junto a otros 5 soldados que estuvieron bajo su responsabilidad.
El 1° de abril partió hacia la ciudad de Bahía Blanca para embarcar posteriormente a bordo del Almirante Irizar. Al día siguiente, el 2 de abril, el soldado Ortega integró la masa de la Compañía “C”, arribando hasta el entonces Puerto Stanley transportado en helicóptero. Tomó junto a sus compañeros la localidad Ganso Verde el 3 de abril.
Durante los combates de Darwin el soldado Ortega participó de un contraataque efectuado por su compañía en el cual su sección se aferró en el combate con el enemigo durante 30 minutos. Después de unos cuántos intentos y habiendo rechazado el jefe de Sección, subteniente Gómez Centurión,la intimidación a rendirse que le hiciera un oficial británico, el enfrentamiento volvió a reactivarse. Fue allí que a causa del hostigamiento ejercido por el enemigo dieron la orden de que el grupo de combate se repliegue hasta sus posiciones originales. El enfrentamiento duró hasta las primeras horas de la noche. Allí, junto a los soldados José Luis Allende, Ricardo Andrés Austin y Ramón Angel Cabrera; el cabo Héctor Rubén Oviedo y el sargento Sergio Ismael García, murió en combate José Honorio Ortega. La hora oficial de fallecimiento marcaría la fecha que modificó para siempre la vida de la familia: eran las
11:30 de ese 28 de mayo.
11:30 de ese 28 de mayo.
La última de las 6 cartas enviadas por el soldado santacruceño fue el 22 de mayo. “Llegaba una por semana”, recuerda en cada entrevista Sonia Cárcamo.
Con la esperanza de que su hijo retornara de las Islas Malvinas, Sonia y José -su esposo- esperaron los 15 días que contemplaba el Ejército para buscar a los soldados. En el mes de junio finalizó la infructuosa guerra y no vieron regresar a su hijo.
La historia documentada
“Sólo conocido por Dios” se titula el documental que registra la historia de José Honorio Ortega, el cual fue rodado por el director patagónico Rodrigo Magallanes, quien retrata esta tierra desde la hiriente realidad de la Guerra de Malvinas y con la historia del único soldado santacruceño que cayó herido de muerte en Pradera del Ganso, quien conocía el frío y la aridez de la zona, pero no lo que significaba estar librando una guerra para la que nadie está preparado.
La producción del documental corrió por cuenta de LU85 TV Canal 9 de Río Gallegos y contó con la colaboración de diversas entidades del país y del exterior, públicas y privadas. Ha tenido difusión por colegios, canales de televisión, centros de ex combatientes de nuestro país, habiendo sido proyectado en muchas localidades de nuestra provincia.
Magallanes reconstruyó detalladamente la vida de José, desde su nacimiento, infancia y adolescencia en Río Gallegos, destacando su actuación en la guerra hasta su deceso en el frente. Los padres del soldado, Sonia de Ortega y José Bernardino Ortega, son el eje principal del relato que también suma a los amigos de la infancia.
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